No se lo podían creer los estadounidenses, los brazos en jarra, las caras largas e incrédulas, pero Alemania les dejó, efectivamente, sin oro ni final en la Copa del Mundo 2023. Los germanos completaron el partido de sus vidas, una victoria histórica por 111-113, para derrotar por primera vez al Team USA y acceder a su primer partido por un título mundial. Fue el triunfo de un gran grupo, el único invicto y el más sólido y completo a lo largo del campeonato junto a la Serbia de Svetislav Pesic, contra quién chocarán en la gran final del torneo en Filipinas.
Les salió todo a los alemanes, que jugaron sin complejos y superaron la apuesta ultraofensiva de las estrellas NBA con una dosis más alta de su propia medicina. Con un recital en el tiro, un 68% en tiros de dos (28/41) y un 43% desde la larga distancia (13/30), se cargaron al combinado dirigido por Steve Kerr, que jugó bien pero para nada logró imponer su teórica superioridad con sus doce debutantes en el escenario FIBA, cada vez más hostil para los otrora invencibles conjuntos estadounidenses.
El recital de baloncesto colectivo alemán estuvo capitaneado por un desconocido para los gurús de la NBA, Andreas Obst. El escolta del Bayern y ex del Obradoiro, lideró la anotación del encuentro con 24 puntos y un 4 de 8 en triples complementados con 6 asistencias y un triplazo a falta de 1:15 que fue el principio del final para el rival. Dejando en el suelo a Haliburton, destrozando el sueño americano, clavó un triple que ponía el 107-111 en el marcador. Luego llegó un tapón de Isaac Bonga sobre Mikal Bridges, hasta ese momento infalible en el tiro para los estadounidenses. Al otro lado, Dennis Schroder clavó la daga desde la media distancia con 40 segundos (107-113) y solo Austin Reaves logró alargar la agonía de los favoritos a campeonar.
Otro que se lució, aunque más conocido por su papel protagonista con los Orlando Magic, fue Franz Wagner. El habilidoso alero endosó 22 puntos y capturó 5 rebotes contra sus colegas de la NBA. Todos los jugadores, absolutamente todos, de Gordie Herbert resultaron clave para conseguir la machada histórica y el mejor resultado teutón en un Mundial.
Mucho ha llovido desde Indianápolis 2002 y los tiempos del mejor Dirk Nowitizki, que entonces llevó a Alemania hasta el bronce. "¡Siiií!", celebraba la leyenda a través de su cuenta en X. Ahora será plata u oro, pero si se cumple la estadística de los últimos cuatro títulos, solo quien terminó invicto logró ganar. En esas estan los alemanes, que por el camino dejaron sin estrella a los próximos pesos pesados del universo NBA.
Anthony Edwards, autor de 23 puntos, 8 rebotes y 3 asistencias, erró un pase decisivo cuando renunció a lanzar a medio minuto del final. Le quemó el balón al principal referente estadounidense y artífice del intento de remontada a la desesperada del Team USA. Esa jugada terminó de hundir a un equipo incapaz de jugar con la urgencia necesaria a lo largo de la final anticipada. Los americanos llegaron a ir 12 abajo en el ecuador del cuarto final, y una vez más empezaron cayendo en un agujero de dobles dígitos en el primer cuarto (15-25, min. 6)
Después de colocarse por delante al descanso (60-59) y encajar un rapapolvo en el tercer cuarto (24-35 de parcial) para llegar 84-94 a los 10 minutos de la verdad, prácticamente sin tiempo para reaccionar, los de Kerr tiraron de orgullo y talento. Los nervios y la falta de experiencia, también su escaso recorrido de seis semanas como grupo, les abocaron a jugársela con las individualidades típicas de la NBA. La receta, una vez más, se demostró agotada en un escenario FIBA que premia a los equipos de verdad. Los fogonazos de Edwards, Austin Reaves (21 puntos) y Mikal Bridges (17 puntos) mantuvieron vivos a los estadounidenses, casi siempre a remolque en el marcador.
No es que jugaran mal ni mucho menos, simplemente tocaron techo en el torneo y no pudieron superar la cohesión alemana y su resolución camino a la final. Jalen Brunson firmó su mejor partido en el torneo con 15 puntos y 7 asistencias, y aún así Kerr prefirió a su suplente Tyrese Haliburton (7 puntos y 8 asistencias) para los minutos decisivos. Los falsos cincos, Portis, Banchero y Jackson Jr., perdieron una vez más la batalla por el rebote (28-30), y Alemania convirtió sus 12 rebotes ofensivos en 25 puntos que machacaron los ánimos del rival.
Más allá de un par de instancias donde forzó demasiado, parte del éxito de Alemania tuvo mucho que ver con el temple de Dennis Schroder y su capacidad para derivar el protagonismo en los demás. Después de su horrendo encuentro en los cuartos contra Letonia, el base de los Toronto Raptors supo contemporizar sus apariciones y terminó aportando 17 puntos y 9 asistencias clave para triunfar.
Otro que se lució fue Daniel Theis, decisivo con 21 puntos y 7 rebotes como líder del asalto interior alemán. Johannes Thiemann, atento a todos los balones divididos, rascó 10 puntos y Moritz Wagner, de la misma guisa, completó con otros 10 tantos el festín de dobles dígitos de hasta seis jugadores en el conjunto germano.
El fracaso estadounidense será uno más en su historia, que solo contempla el oro como resultado válido para los representantes de la gran potencia del baloncesto mundial. Cada vez más global, y dominado incluso en la NBA por los astros europeos, los Jokic, Doncic y Antetokounmpo, el juego coral que rige todavía en la escena internacional puso en la gran final de Manila a los dos representantes de la mejor escuela europea en el torneo.
Alemania y Serbia, dos ejemplos de los valores colectivos que hacen grande al baloncesto y al deporte en general, se jugarán el título el domingo a partir de las 14:40h en horario peninsular.
Ficha técnica
Estados Unidos 111-113 Alemania
Estados Unidos (111): Jalen Brunson (15, Anthony Edwards (23), Mikal Bridges (17), Josh Hart (9), Jaren Jackson Jr. (8) -quinteto inicial-; Paolo Banchero (6), Tyrese Haliburton (7), Cameron Johnson (0), Bobby Portis Jr. (5), Austin Reaves (21), Walker Kessler (-), Brandon Ingram (-).
Alemania (113): Dennis Schroder (17), Andreas Obst (24), Franz Wagner (22), Daniel Theis (21), Johannes Voigtmann (6) -quinteto inicial-; Isaac Bonga (3), Niels Giffey (0), Maodo Lo (0), Johannes Thiemann (10), Moritz Wagner (10), Justus Hollatz (-), David Kramer (-).
Parciales: 31-33 / 29-26 / 24-35 / 27-19.
Árbitros: Antonio Conde (España), Boris Krejic (Eslovenia), Gatis Salins (Letonia).
Incidencias: segunda semifinal del Mundial 2023 disputada en el Mall of Asia Arena de Manila, Filipinas.
